La terapia fotodinámica es una modalidad terapéutica basada en la fotooxidación de moléculas biológicas inducida por un fotosensibilizante, el cual se localiza selectivamente en determinadas células, de forma que al ser iluminadas con una luz adecuada en dosis suficiente, dichas células resultan destruidas.

El tratamiento consiste en la aplicación sobre las lesiones de una crema de metil-aminolevulinato (agente fotosensibilizante). Posteriormente, es posible realizar la terapia mediante la exposición a la luz solar (de forma controlada, por el médico) o bien se realiza una oclusión de la zona durante unas horas para luego realizar la exposición bajo una lámpara con una longitud de onda de entre 400 - ­600 nm. Después de la activación del fotosensibilizante por la luz se estimulan las porfirinas intracelulares, facilitando la liberación de radicales libres e iniciándose así la destrucción de la lesión que hay que tratar.

Se considera una opción terapéutica en auge por su eficacia, sencillez, rapidez de acción y excelente resultado cosmético. Puede ser empleada en multitud de procesos que se sitúan en la epidermis y capas más superficiales de la dermis, siendo de elección en casos de fotoenvejecimiento moderado­severo, y útil en casos de queratosis actínicas, carcinomas cutáneos, verrugas víricas y algunas enfermedades inflamatorias.

Es habitual la sensación de quemazón durante la exposición a la luz. Estas molestias comienzan unos minutos tras el inicio de la misma y desaparecen al poco de su finalización. La rojez y/o leve hinchazón suelen ser limitados y no requieren tratamiento.