La cavitación una técnica no invasiva para moldear el cuerpo que reduce volumen eliminando los depósitos de grasa localizada principalmente en abdomen, caderas, cara interna de muslos y brazos. En este procedimiento se utilizan ultrasonidos de baja frecuencia sobre la superficie de la piel para producir cambios de presión y temperatura en el líquido intersticial del tejido graso. Las ondas ultrasónicas convergen en la zona a tratar y provocan la formación de “microburbujas” que acumulan energía hasta fragmentarse rompiendo la membrana de los adipocitos (células grasas) y permitiendo la liberación del contenido de los mismos. Estas grasas liberadas serán metabolizadas y eliminadas de forma natural por el cuerpo humano, a través del sistema linfático, venoso y finalmente la orina.
Este proceso se realiza sin dañar la microcirculación ya que los vasos sanguíneos pueden absorber esta sobrepresión sin ruptura. Tampoco perjudica a órganos o tejidos circundantes. Es un tratamiento especialmente indicado para aquellas personas que desean moldear su cuerpo sin recurrir a la cirugía, ya que la disminución de los depósitos localizados de grasa es apreciable desde las primeras sesiones. Es imprescindible llevar una dieta equilibrada y beber abundante agua, tanto antes como después del tratamiento, para favorecer la eliminación de las grasas movilizadas.